TRABAJOS PREVIOS: Tener puesto a calentar el horno termostato a 220 grados, y entre tanto cascar los huevos aprovechando las yemas de cuatro y, además, uno entero, yema y clara, pizca de sal, batir con tenedor como para tortilla, añadir el azúcar y mezclar bien a fondo.Desmenuzar el coco ya rallado si está apelmazado, para ir espolvoreando sobre el batido, y mezclar a fondo. El coco rallado no siempre es idéntico, suele venir unas veces bien seco y otras veces tiende a apelmazarse, a formar bolas que hay que desmenuzar, y dejar la pasta bien homogeneizada.
Tiene importancia que la pasta final quede seca, ir pues añadiendo más coco si no queda bien seca, dejándola que casi se desmorones, que apretando algo con las yemas de los dedos quedará firme.
EJECUCIÓN: Midiendo la cantidad con una cucharilla, vamos haciendo pequeños conos en la misma cucharilla del tamaño de 3cm diámetro de base y 3 cm. altura, incluso poco mayores, colocándolos sobre la lámina de sylplat algo separadas unas de otras, suelen caber 52 pastelitos por hornada.
El peso en crudo de cada pastelito es de 10 gramos, o poquito más, una vez hor